Black Mirror es una serie de ciencia ficción británica y estadounidense escrita por Charlie Brooker. Su trama va en torno a cómo los avances tecnológicos han afectado la vida del ser humano, al punto de afectar la interacción social y sacar lo peor de las personas.
Posee actualmente 5 temporadas, con menos de 10 capítulos cada una. Cada episodio es independiente, es decir, no siguen una cronología por lo que pueden verse sin llevar un estricto orden.
Black Mirror comenzó como una serie lanzada en la plataforma de streaming Netflix, sin embargo ya son varios los canales de televisión que transmiten los capítulos.
A continuación, puedes ver 7 razones por las que deberías disfrutar de esta serie.
Razones para ver Black Mirror
- Es una visión futurista de lo que la tecnología puede hacerle al ser humano. Cada uno de los episodios tiene una temática diferente de cómo la tecnología puede afectar la vida del hombre, desde diferentes perspectivas y situaciones. Las situaciones que presentan en los episodios bien pueden ser reales y, probablemente sea por eso, que capta la atención del espectador.
- Es una clara crítica a la sociedad actual, donde cada vez se pierde el hábito de la interacción entre personas. Es una manera diferente de tratar la ciencia ficción, con una trama con historias que pueden suceder en un futuro, y que claramente es una desventaja para la sociedad y para el ser humano en sí. Con sus particulares guiones, que caracterizan de ser algo ácidos, satirizan y critican de manera audiovisual el mundo actual.
- Se lanzó una película con la misma temática de la serie, pero donde el espectador puede elegir qué es lo que sucede en ella. La película va en torno a un videojuego real, juntado con un largo historial de leyendas urbanas gamers sobre “juegos malditos” de la década de los 80. Se trata de un joven programador, Stefan (interpretado por Fionn Whitehead), obsesionado con adaptar su libro favorito, Bandersnatch, en una aventura gráfica. Es una historia donde el espectador elige la dirección de la película, donde hay cinco finales, con diversos caminos que llevarán a alguno de ellos.
- Es breve, pero no deja de ser buena. Los capítulos duran un aproximado de una hora, condensados de contenido visual y una trama que deja atrapado al espectador en los primeros 10 minutos de historia. No tienen continuidad argumental alguna, lo que hace más agradable de ver.
- Una dirección de fotografía que deja deseando ver más. El equipo audiovisual es dedicado en su trabajo. Cada capítulo cuida detalladamente los planos, la iluminación, los encuadres, colores y demás elementos que se juntan, haciendo un trabajo agradable y atractivo para el espectador.
- Cada capítulo deja la mente pensando, en un debate sobre lo que sucedió en él. Cada historia está meticulosamente pensada y construida con un argumento que, indudablemente, genera una discusión posterior. No solo sobre cuál fue el mejor capítulo de la temporada, o el mejor momento del episodio, sino otros aspectos como qué critica la serie de la sociedad, cómo influye la tecnología en cada aventura, o sobre cualquier otro detalle.
- Es un giro constante de emociones. Los productores y guionistas se unieron para crear una hora de tensión pura, una angustia sofocante que mantiene el cuerpo rígido, a la espera del desenlace, crea un deje de miedo por las situaciones que se presentan en cada historia y un manojo de sentimientos que atrapan y no hacen más que dejar al espectador pensando.
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muy buen…me dejó con impresiones